No hay nadie que te ame más como Él,
acércate al Señor.
Si pedimos cualquier cosa conforme a su voluntad, Él nos oye
Orar es decirle al Señor:
“Aquí estoy” necesito tu compañía, tu amistad…
La Oración es un impulso del corazón, una mirada hacia el cielo. Es elevar tu alma ó petición de bienes convenientes a Dios. No necesitas una hora ó cita especial, habla con Él, como un hijo habla con su padre. Así de una forma sencilla. Orar es alabar al Señor, agradeciendo todo lo bueno que es con nosotros.
Al rezar, no solo deja que actúe tu mente, también ora con el corazón.
Cuando se reúnan, reciten salmos e himnos,
cantando y celebrando al Señor de todo corazón.
Siempre y por cualquier motivo,
den gracias a Dios, nuestro Padre,
en nombre de nuestro Señor Jesucristo”
(Ef. 5:19-20)
Hasta Mañana
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Gracias por compartir este mensaje nocturno
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